Te recomendamos comenzar tu día en Madrid cogiendo fuerzas en dos lugares míticos de la capital para desayunar: La Mallorquina, donde sirven desde 1894 unas espectaculares napolitanas; o en la Chocolatería San Ginés, donde desde el mismo año llevan ofreciendo unos deliciosos churros con chocolate. Ambos están ubicados por las inmediaciones de la Puerta del Sol, así que podrás llegar cómodamente en metro o tren de Cercanías.

Puedes coger el metro hacia la parada de Retiro o caminar hacia el Parque del Retiro, que será tu primera parada 

El lugar más destacado es el estanque artificial, que se puede recorrer en una pintoresca barquita de alquiler. Allí también está el Monumento a Alfonso XII y el espectacular Palacio de Cristal, uno de los mejores ejemplos de la llamada arquitectura de hierro en Madrid, que se diseñó como un enorme invernadero para albergar las plantas tropicales de la Exposición de Flora de las Islas Filipinas, en 1887.

Después de recorrer el Parque del Retiro, te animamos a dirigirte por la salida que da hacia la Plaza de la Independencia, conocida por albergar la icónica Puerta de Alcalá. Esta es una de las cinco antiguas puertas reales que daban acceso a Madrid

Realizada en estilo neoclásico por mandato del rey Carlos III, el diseño es del arquitecto italiano Francesco Sabatini y tiene un aspecto similar a los Arcos de Triunfo romanos. Como curiosidad, fíjate en los niños que la coronan, que representan a las cuatro virtudes cardinales: la fortaleza, la justicia, la templanza y la prudencia.

En la Puerta de Alcalá tiene parada el autobús turístico de Madrid, que puede ser una buena idea si solo tienes un día en Madrid. Podrás montarte tantas veces quieras y a lo largo del recorrido irás recibiendo información sobre los lugares por los que pases.

En el centro de la plaza se encuentra la espectacular Fuente de Cibeles, que quizás te suene porque es el lugar de celebración de los títulos del Real Madrid Club de Fútbol. La Cibeles, como la llaman cariñosamente los madrileños, también fue una iniciativa de Carlos III, que concibió un plan de remodelación urbana en el siglo XVIII. La fuente representa a la diosa griega Cibeles, que en el panteón griego era Rea, madre de los dioses olímpicos y símbolo de la tierra y la fecundidad montada en un carro tirado por leones.

Además, en la plaza se encuentran varios bellos edificios a los que prestar atención:

• Palacio de Linares: precioso palacio de finales del siglo XIX mandado a construir por los primeros marqueses de Linares. Tras más de 100 años cerrado, en 1992 alberga la Casa de América, donde tienen lugar exposiciones, charlas, conferencias y cursos sobre el intercambio cultural entre España y América. Es posible visitar el palacio en visitas guiadas los viernes, sábados y domingos por 8€ por persona o asistir a alguno de los muchos eventos que aquí se celebran.
• Banco de España: la sede principal de la institución, construida entre 1884 y 1891.
• Palacio de Buenavista: una obra de la familia del ducado de Alba, que data de finales del siglo XVIII y que hoy es el Cuartel General del Ejército. Solo se puede visitar pidiendo una autorización previamente.
• Palacio de Cibeles: es uno de los edificios más impresionantes que verás durante tu ruta de un día en Madrid. Fue construido a comienzos del siglo XX, convirtiéndose en uno de los primeros ejemplos de arquitectura modernista, con una fachada que mezcla elementos neoplaterescos y del barroco salmantino. En un inicio fue la sede de la Sociedad de Correos y Telégrafos de España, pero hoy es la del Ayuntamiento de Madrid. Hay varias partes que se pueden visitar, incluyendo un área cultural llamada “CentroCentro”. Lo más interesante es el acceso al Mirador del Palacio de Cibeles, desde el que se obtienen unas vistas de Madrid maravillosas por tan solo 3€. Conviene reservar con antelación para evitar las colas o no quedarte sin sitio. Tienes más información en su página oficial.

Como visitantes, lo más interesante es la azotea, abierta hace unos años como restaurante y bar y desde donde se puede ver de cerca la magnífica escultura de Minerva, una pieza en bronce de la diosa romana, y, por supuesto, unas vistas de Madrid de infarto, con el edificio Metrópolis en primer plano. Para nosotros, es uno de los mejores miradores de Madrid y la entrada cuesta solo 5,50€.

Nos desviamos un poco del itinerario para conocer dos de los básicos de una ruta por Madrid en un día: la Fuente de Neptuno y el Congreso de los Diputados. Podrás alcanzar la primera bajando por el Paseo del Prado desde la Plaza de Cibeles.

La de Neptuno es otra de las fuentes conocidas de Madrid. Preside la glorieta ubicada en la Plaza de Cánovas del Castillo y fue inaugurada en 1786. También formó parte de los planes de renovación de la ciudad de Carlos III y en ella se muestra a Neptuno, el dios del mar, con una culebra enroscada en la mano derecha y el tridente en la izquierda sobre un carro en forma de concha tirado por dos hipocampos o caballos marinos. Como ocurre con la Cibeles, es en Neptuno donde los hinchas del Atlético de Madrid celebran sus victorias.

Sigue avanzando por la Carrera de San Gerónimo admirando sus monumentales edificios porque la siguiente parada de esta ruta por Madrid en un día es la popular Plaza o Puerta del Sol, donde finalizan algunas de las calles más famosas de la ciudad como la de Alcalá, una de las arterias principales de la ciudad.

Párate un momento a admirarla porque aquí tienes varios puntos de interés. El primero es la Estatua ecuestre de Carlos III; después, en el corazón de la plaza está el Reloj de la Casa de Correos, donde se llevan dando las campanadas para celebrar año nuevo desde el año 1962. Junto al edificio está la placa del kilómetro 0, que marca el inicio de todas las carreteras de España. Sube la vista al cielo para ver el famoso cartel de Tío Pepe y, finalmente, junto a la moderna Apple Store, está la Estatua del Oso y el Madroño, el símbolo de la ciudad y lugar para quedar con amigos típico entre madrileños.

La Puerta del Sol suele ser uno de los sitios más bulliciosos de Madrid, llena de gente en cualquier punto del día. Aquí encontrarás manifestaciones, vendedores de todo tipo, una estación de metro y tren y una famosa tienda de administración de lotería, de la que sale una larga fila durante todo el año.

Desde la Puerta del Sol localiza la Calle Mayor para luego girar a la izquierda por la Calle de Esparteros y enfilar la Calle de Postas, que desemboca en nuestra plaza favorita de Madrid, la Plaza Mayor. Hablamos de una preciosa plaza rectangular de 129 metros de largo y 94 de ancho que se terminó de construir en 1619 y en la que destaca la Casa de la Panadería, el primero que empezó a levantarse, concretamente en 1590. Lo reconocerás fácilmente por su blasón en piedra con las armas de Carlos II.

En la plaza, además de un montón de terrazas de restaurantes y el tradicional mercado en Navidades, se puede ver la Estatua de Felipe II, que data de 1616 y que fue un regalo del Duque de Florencia; y el Arco de Cuchilleros, la más famosa de las 10 puertas por las que se accede a la Plaza Mayor.

Una parte importante de esta ruta por Madrid en un día es la gastronomía y estando por aquí, si ya te pica el hambre, no podíamos dejar de recomendarte que pruebes el mítico bocadillo de calamares de La Campana, posiblemente uno de los más conocidos de toda la ciudad

Si tienes hueco, pásate por el Mercado de San Miguel, un gastromercado en el que todavía se puede admirar la estructura de hierro original y que está repleto de puestos de comida. Es un lugar muy turístico y los precios no son especialmente económicos, pero, además de bonito, hay productos de mucha calidad.

La ruta de Madrid en un día continúa metiéndonos de lleno en el Madrid de los Austrias y avanzamos por la Calle Mayor disfrutando de algunos de sus edificios más importantes. Entre ellos destacamos el edificio de la Compañía Colonial, el Palacio de Abrantes y el Palacio del Marqués de Caramasa o el Palacio de los Consejos (también llamado Palacio de Uceda).

Aun así, te recomendamos que hagas una parada en la Plaza de la Villa, que fue uno de los principales núcleos del Madrid medieval y que fue conocida como la de San Salvador por la iglesia del mismo nombre. En ella podrás admirar las fachadas de tres edificios de gran valor histórico-artístico. El más antiguo es la Casa y Torre de los Lujanes, que data del siglo XV y en el que se aprecia su estilo gótico-mudéjar. La Casa de Cisneros es del siglo XVI y se trata de un palacio plateresco y, finalmente, la Casa de la Villa, del siglo XVII y un edificio barroco que es una de las sedes del Ayuntamiento de Madrid.

Al final de la Calle Mayor encontrarás la Catedral de Santa María la Real de la Almudena o Catedral de la Almudena, el edificio religioso más importante de esta ruta por Madrid en un día. Dedicada Nuestra Señora de la Almudena, la patrona de Madrid, es un inmenso edificio construido desde finales del siglo XIX hasta finales del XX en diferentes estilos arquitectónicos: neoclásico por fuera, neogótico por dentro y neorrománico en la cripta.

La entrada solo cuesta 1€ y merece la pena hacer una visita rápida para admirar sus vidrieras. Si vas bien de tiempo, también puedes entrar al museo y la cúpula, que cuestan 7€.

Junto a la Catedral de la Almudena está otro de los puntos de interés el Palacio Real. Esta es la residencia oficial de los reyes de España, aunque actualmente viven en el Palacio de la Zarzuela. Fue construido a mediados del siglo XVIII y su gran extensión hace que sea el palacio real más grande de Europa Occidental, casi el doble del de Buckingham o el de Versalles.

Obtendrás una panorámica casi completa del Palacio Real desde la Plaza de Oriente y los Jardines de Sabatini. Estos últimos son los jardines anexos al palacio, cuya entrada es totalmente gratuita. Por otro lado, en la Plaza de Oriente se encuentra también el Teatro Real

Desde la Plaza de Oriente o los Jardines de Sabatini seguimos nuestro itinerario de Madrid en 1 día pasando por la enorme Plaza de España, presidida por el impresionante Edificio España. Aquí también tienes que fijarte en varios edificios de interés más como la Torre de Madrid, que fue durante mucho tiempo el más alto de Madrid; la Casa Gallardo y la que fue la Real Compañía Asturiana de Minas.

Después, enfila la Calle de Ferraz para encontrarte con uno de los lugares más curiosos de Madrid, el Templo de Debod. Este es un templo egipcio de más de 2.200 años, regalo del gobierno egipcio por la ayuda prestada por España al salvar el de Abu Simbel cuando se construyó la Gran Presa de Asuán.

A día de hoy, el templo está rodeado de un agradable parque donde madrileños y visitantes vienen a relajarse. Además, dada su ubicación, es un lugar estupendo para disfrutar de la puesta de sol. Te recomendamos acercarte a la parte trasera del templo, donde se encuentra el estupendo Mirador de la Montaña, con vistas a la Catedral de la Almudena y toda la zona del Palacio Real.